Monday, December 15, 2008

María de nuestra identidad latina a la universalidad del creyente


Tercer Domingo de Adviento. Reflexión

María, más allá de nuestra identidad como pueblo

Hemos contemplado en María de Guadalupe, todo aquello que la relaciona con aspectos de orden cultural, es decir aquellas formas culturales que siendo tradición y con gran folklore, alegran nuestro corazón y nos hacen sentir parte de un pueblo, tener una identidad. A la Guadalupana se le relaciona con nuestra mexicanidad.

Pero la devoción Mariana, no es sólo una expresión propia de nuestra identidad. María es Madre de Dios, capáz de encender la espiritualidad de todos los pueblos de la tierra. No sólo de los latinos.

Un personaje clave en la lectura del evangelio de éste domingo en la iglesia es María. Ella es testigo vivencial de que para Dios, lo imposible se hace posible. La conversión es un hecho real que personas experimentan. Nada está perdido para siempre. Ella asume el riesgo de aceptar el rechazo de todos. No piensa en lo que dirán o harán los demás, piensa en cómo podrá ser posible para Dios, que en ella se cumpla su voluntad.

El Mesías esperado por nosotros, debe superar las expectativas de un liderazgo social. Su palabra vale para todas las épocas y lugares. Los pueblos se someterán a Cristo. Los gobernantes de la tierra pasarán, pero el acontecimiento Cristo, vivirá para animar la esperanza de todos los pueblos.

Diac. Ricardo Reyna García